Sapphire OG
Los híbridos modernos se construyeron sobre la base de la excelencia. Y esta creación reina por sus inconfundibles
aromas de calidad contrastada, respaldados por una potencia increíble, lo que ha convertido a Sapphire OG en
uno de nuestros sabores más deseados e icónicos en el catálogo de Humboldt Seed Organization. El infame clon de
élite “Florida OG”, cruzado con nuestra OG Afghan, proporciona una variedad única y emocionante para que todos los
cultivadores la admiren y disfruten. Si se atiende correctamente, esta planta supera con creces las expectativas, por lo que debe
estar en cualquier colección genética que se precie.
Sabor y efectos
Fuerte esencia con complejos matices de pino y gasolina, seguidos de notas agudas de canela y especias,
acompañadas de sutiles pinceladas de chocolate y nuez moscada. Un fuerte subidón cerebral que es
ideal para disfrutar al final del día. Los usuarios experimentados disfrutarán de su aspecto mentalmente
relajante pero estimulante, sin dejar de ser genial para la creatividad y el suave disfrute.
Morfología
El crecimiento agresivo y saludable marca las primeras etapas de la Sapphire OG, por lo que necesita poco
mantenimiento durante estas fases iniciales. Los regímenes de alimentación modestos la hacen ideal para
una amplia gama de habilidades de cultivo. De naturaleza alta y larguirucha, debido a su ascendencia
dominante OG, permite un buen espacio entre los nudos y una penetración más profunda de la luz en
el dosel vegetal. Hermosos cogollos multicolores con tonos de púrpura y verde forman grandes colas
cubiertas de resina brillante, mientras que cogollos más pequeños, del tamaño de una pelota de golf, se
desarrollan en las capas de ramas secundarias y terciarias.
Consejos de cultivo
Las plantas se pueden cultivar con dietas modestas y regímenes nutricionales ligeros. Ideal para cultivo
optimizado SOG (“Sea of Green”), aunque funciona increíblemente bien en escenarios muy tupidos debido
a una mejor penetración de la luz a través de las hojas delgadas en abanico. Las plantas duplicarán su
tamaño desde el período vegetativo hasta el de floración y es fundamental utilizar mallas de sujeción,
preferiblemente de dos capas, para apoyar el desarrollo en etapas posteriores. Para el cultivo de interior,
las plantas se pueden organizar densamente y tienen la capacidad de admitir una alimentación más
fuerte. La segunda y tercera capa del dosel vegetal forman cogollos densos durante las etapas finales de
la floración, ofreciendo una capacidad de producción sustancial. Exterior: se recomienda que las plantas se
ayuden de jaulas de metal cuando se cultivan a pleno sol, con redes de enrejado para las segundas capas.
Es fundamental limpiar o ahuecar el interior de las plantas, para permitir un mayor flujo de aire antes
del crecimiento de los cogollos principales; y se recomienda encarecidamente que se aborde durante
las primeras dos semanas de floración, para favorecer el desarrollo de los brotes terminales. Las plantas
deben podarse apicalmente varias veces para garantizar una mayor superficie, lo que da como resultado
un mayor rendimiento. Aunque son ligeramente susceptibles al oídio, por lo que se deben aplicar
medidas preventivas en consecuencia.