Amnesia saltó a la fama en poco tiempo y por argumentos de peso, que le permitieron ganarse la confianza del consumidor habitual. Tal popularidad le catapultó desde la costa oeste de Estados Unidos hasta la meca de la marihuana en Europa: Amsterdam, ciudad en la que sigue teniendo un lugar destacado en la carta de los coffeshops.
La reputación de este clásico se ha fraguado, principalmente por el efecto que produce su consumo. Es una variedad estimulante gracias a una mayor carga sativa en su genética. Además, es creativa porque permite al consumidor abrir su mente a nuevas ideas y/o proyectos. Por otro lado, esta variedad reduce notablemente la ansiedad y el estrés. Por último, presenta un efecto sociable, porque favorece las relaciones sociales.
Todas estas características las hemos incluido en Buddha Amnesia como homenaje a este clásico. Recomendamos en cultivos de interior no darle más de dos semanas de crecimiento por su gen sativo, o bien optar por podas y/o técnicas de cultivo como el Scrog o el LST.
En cuestión de sabores y aromas destaca notablemente su increíble sabor a incienso. Como si de una catedral se tratase, esta variedad inunda de aroma la habitación y tus sentidos.
Este efecto tan característico de este clásico es usado ampliamente por pintores, músicos y artistas de todo tipo para momentos en los que hace falta una chispa de creatividad. Por supuesto, los fumadores lúdicos la aprecian por esto y su facilidad de provocar la risa rápidamente. Además, Buddha Amnesia puede alcanzar elevados porcentajes de THC.
Destacan fenotipos con toques cítricos, de las que salen las líneas Amnesia Lemon y otras con matices a maderas. El sabor perdura en boca mucho tiempo, disfrutado en cada expiración durante minutos. De la variedad Haze conserva su riqueza en terpenos que la sitúa entre las preferidas para recetas culinarias.
